Aquí te contamos cómo llega nuestra carne de res a tu mesa. Primero, buscamos una granja de calidad, es decir, todos nuestros proveedores deben ofrecer una alimentación balanceada a los animales, compuesta por: maíz, sorgo y alfalfa. Cada proveedor debe tener las certificaciones y aprobaciones necesarias.
Una vez que nos aseguramos de esto, adquirimos la carne de proveedores nacionales y extranjeros, basándonos en dos principales puntos para adquirir la carne:
- Quienes realizan el sacrificio sin estrés de los animales de acuerdo con la NOM-033 ZOO 1995.
- Y si cumplen con los lineamientos del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), sobre inocuidad, calidad y buenas prácticas.
Una vez que recibimos la carne deshuesada, es analizada para comprobar su calidad en la Planta de procesamiento Trosi. La carne se muele para facilitar su manejo y se analiza para confirmar que el porcentaje de grasa, la temperatura y el valor nutrimental cumplan con los estándares de calidad.
Después de esto, la carne se muele nuevamente para reducir el tamaño de los trozos y de esta forma darle una textura más tierna, eliminando los posibles trozos de huesos para seguir con el proceso de compresión dándole forma de hamburguesas. Buscando siempre que tengan el tamaño y forma adecuada, cubriendo las especificaciones del producto y el consumidor final.
Las piezas de carne se congelan de manera individual (IQF) por un lapso de 30 minutos, a -18ºC: para mantener su textura, olor, color y sobre todo, asegurar su seguridad y conservación.
Por último, el producto es empacado para su venta en los diferentes canales de venta Bachoco. Se almacenan y se conservan en congelación para después ser transportados a los canales de venta.
